En primer lugar, escoger la linterna.

La importancia de las linternas depende mucho del entorno en que se bucee, para la penetración en pecios y para los espeleobuceadores resultan un elemento de seguridad fundamental, pues las cuevas y los pecios son muy, muy oscuros. Sheck Exley dice, en su manual de buceo en cuevas, que la luz es una ayuda fundamenteal para poder seguir el hilo guia, en realidad, dentro de una cueva, sin luz, estás un 99% muerto. Los buceadores técnicos utilizan tres lámparas (una primaria y dos secundarias). Cualquiera de ellas debe tener potencia y autonomía suficiente para completar la inmersión (es decir, para poder seguir el hilo guía sin que el stress y otras dificultades adicionales hagan insuficiente la regla de los tercios y el buceador se quede sin aire antes de la salida).

Actualmente, para buceo técnico, la luz principal consiste en un pequeño foco HID colocado en el dorso de la mano por medio de un asa tipo Goodman y unido por un cable umbilical a un bote o canister fijado en el cinturón y que contiene una batería de Ni-MH o Litio. La colocación del canister y el enrutado del umbilical son dos aspectos perfectamente definidos en la configuración DIR y, en aguas abiertas, en caso de ser necesario, el contenedor de la batería actúa además como lastre largable.

De forma explícita se desaconsejan los focos integrados (con la batería y la lámpara en un mismo contenedor) por considerarse pesados e inmanejables. Esto es especialmente cierto si nos referimos a focos halógenos con baterías de Níquel-Cadmio con varias horas de autonomía.

Pero en los últimos tiempo las cosas han cambiado mucho, con la introducción de los LED's de alta intensidad capaces actuar como luz principal. Los focos compactos de LED's con una potencia equivalente a 40-50 W halógenos y una gran autonomía, resultan casi tan compactos como un cabezal simple tradicional y al carecer de umbilical compensan los inconvenientes que supone su ligero sobrepeso. Yo utilizo como luz principal una lámpara supercompacta Dragonsub Microlitium con 3 LED, equivalente a un halógeno de 40 w y con una autonomía de más de 100' con una batería Ion Litio tipo 18650 de 2600 ma/h.

Las asas Goodman rígidas están pensadas para estar colocadas continuamente en el mano. Esto es bueno para el buceo en cuevas o para las inmersiones nocturnas pero puede resultar incómodo y superfluo durante inmersiones diurnas en aguas abiertas.

En muchas ocasiones se ha propuesto el asa semirrígida como una alternativa eficiente. Esta es la opción que detallo a continuación, Puede utilizarse con un foco mínimo o con uno mediano o un cabezal conectado a un cánister. La elección depende de:

• El tipo de luz ambiente.
• La autonomía necesaria.
• Las operaciones a realizar.
• Los peligros de enganche.

Asa Goodman semirrígida:

Las asas semirrígidas resultan muy interesantes, son más cómodas que las rígidas y pueden colocarse más ceñidas a la mano, con lo que quedan más aseguradas y esta gana libertad de movimiento.

En ciertas ocasiones es necesario liberar la mano del asa. La cabeza de lámpara cuelga del umbilical y puede ser recuperado. Si se utiliza un foco compacto sin umbilical debe añadirse un mosquetón sujeto cerca de la base. Este mosquetón se cuelga de un anillo del arnés en caso de tener que liberar la mano, permitiendo utilizar su luz e impidiendo su pérdida.

En http://www.divegearexpress.com/library/boltsnap.shtml hay instrucciones detalladas acerca de como atar el mosquetón a la base del foco.

Tanto Dragonsub como Barboligh tienen es su catálogo asas Goodman semirrígidas. Sorprende ver que alguien capaz de hacer tan buenas linternas ofrezca unas asas tan poco adecuadas.

Brico Asa Goodman Semirrígida.

Construcción:

El asa propiamente dicha está hecha con una pletina de aluminio anodizado de 30mm. de ancho, 3mm. de grueso y 100mm. de largo, aunque esta última medida puede variar algo en función del ancho de la mano (las mías son grandes). Los extremos están redondeados y tienen dos ranuras de 22x4,5 mm. para pasar la cinta. Todos los cortes están muy trabajados con lija fina para evitar rozaduras que acaben estropeando la cinta.

Los soportes de la linterna son dos abrazaderas de tangón de 20mm. (disponibles en tiendas de efectos navales), como la linterna mide 25mm. de diámetro, queda bien apretada. Van sujetas con cuatro tornillos de 4mm. de diámetro con cabeza plana (embutida en el aluminio) y cuatro tuercas autoblocantes. Todo en acero náutico 316 (El A4).

La cinta de cierre es una cinta express, de las utilizadas en alpinismo, de 20 mm. de ancho y doble (es como un tubo aplastado). El doble grosor y las dos piezas de Velcro cosidas en sus caras internas, le proporcionan al asa la rigidez necesaria para ofrecer un buen agarre para la mano.

Si no se utilizan guantes, la pieza transversal de aluminio, puede meterse en una funda termoretráctil de las utilizadas en montajes eléctricos, con lo que resulta más suave al tacto.

Uso con carrete:

El asa Goodman permite utilizar la linterna y un carrete de asa lateral (tipo Woody Jasper) de forma simultánea, con una sola mano. Por ello se ha convertido en la configuración estandar para la penetración en cuevas y pecios.